Princesa en camino a la perfección

sábado, 13 de agosto de 2016

Carta de Mia

Hola mi imperfecta princesa ¿Como haz estado? seguramente no la haz pasado nada bien, con toda esa grasa nunca vas a poder estar a gusto.
Me presento formalmente, mi nombre es Bulimia. Los médicos son mas respetuosos y me llaman Bulimia Nerviosa. Es probable que no te agrade mi nombre, por si no lo sabias significa "hambre de buey" así que mejor llámame Mía, porque a partir de ahora me entrego a ti y seré tuya siempre que me necesites.
Toda tu vida haz sido una cerda, devorar la comida es lo que mejor sabes hacer y no te culpo, el común de los mortales lo hace, sin embargo tú no quieres ser como ellos, anhelas ser especial, perfecta.
Te preguntaras como empieza nuestro juego, realmente es algo muy sencillo. Haz comido, al principio puede ser poco, sin embargo tu no deseas sentir tu cuerpo pesado. Te da una culpa tremenda, sabes que ahora haz echado todo a perder, sientes una ansiedad diabólica y en un segundo terminas con toda la comida que encontraste a tu paso ¡LA GULA ES UN PECADO Y TU ERES UNA MALDITA PECADORA! Yo soy tu penitencia. Una acción imperfecta, pero purificadora. Un camino a la santidad de la perfección.
Después de tu error, nos encontraremos en el cuarto de baño. Se discreto, no queremos que nadie sospeche acerca de nuestra aventura.
Ya estas a solas, vigila que nadie nos escuche porque lo que vendrá a continuación es todo un ritual digno de reyes.
 Te pondrás frente al escusado y poco a poco penetraras con el dedo a tu garganta. Sentirás asco, asfixia, tal vez un poco de dolor pero eso no importa, soy yo que estoy viniendo a salvarte. Poco a poco tus culpas se irán, regresaras cada pedazo, todo lo que entro tiene que salir. Inténtalo. Al principio sera difícil pero poco a poco dominaras este arte.
No puede exigirte demasiado, aun eres solo una aprendiz. Con el tiempo estos ataques serán constantes ya que te gusta revelarte contra el mundo tragando como buey. No puedes liberarte del estrés laboral, escolar o familiar. De lo único que puedes liberarte sin complicaciones es de la comida.
En menos de lo que te imaginas no reconocerás la diferencia entre lo dulce y lo salado, dentro de tu locura comerás hasta lo que cayo al piso, saldrás de tu casa en busca de tus golosinas preferidas, si no tienes dinero robar te sera necesario y si te haz cansado de vomitar, un laxante sera tu salvación.
No importa cuanto te denigres, conmigo a tu lado volverás a ser la misma de siempre, con el tiempo te haré perfecta, ligera y admirable.
Debo advertirte que soy una amante muy caprichosa, es probable que después de pasar mucho tiempo juntas no tengas que llamarme para que aparezca. Te consumiré poco a poco, quizás te haré perder el cabello, la dentadura, tendrás heridas en las manos, desgarrare tu garganta y tu sangre sera el mas preciado regalo que me ofrecerás. Ahora tu seras mía y no permitiré que nadie mas quiera acercarse a ti, te daré un aliento de los mil demonios y unas ojeras que reflejen la muerte.
Todo esto es un pequeño precio a pagar a cambio de todo el placer que te ofrezco...

¿Quieres jugar?

Sinceramente... Mia.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario